Momentos a cámara lenta

No son pocas las veces q me percato de haber vivido uno de esos instantes.

Recuerdo ahora, los mas comunes, esas veces q vas en coche, y tu mirada q viaja distraída por la acera, posándose en los rostros parcialmente iluminados de las parodias de ser humano q desfilan por la calle. Cuando de repente un conocido, viejo o nuevo, desfila ante tus ojos, el tiempo parece q se detiene, casi podrías pintar su cara, cincelar su rostro en mármol con todos sus detalles, poco a poco se gira hacia ti, vuestras miradas se cruzan y BAM!, tu conciencia es expulsada del momento tantrico y devuelta a la realidad de una patada, la velocidad aparente se duplica y todo sucede demasiado rápido en los siguientes segundos… poco a poco te centras, te encuentras raro, en tu mente un pensamiento. Era el?.

Muchos mas hay, como cuando te pillan con las manos en la masa, y tu mente detiene el mundo mientras busca la excusa adecuada para dar a esos ojos inquisidores q te están clavando a la realidad como si fueras una mariposa disecada atravesada por agujas. Pero no voy a entrar en eso ahora, ya estamos en situación.

Estoy aquí jodido intentado recordar, me encuentro fatal, y es algo q arrastro desde la monumental borrachera de ayer, me siento como dentro de un mal traje, da igual lo mucho q te muevas, q te intentes ajustar los hombros, no se ajusta, y no puedes dejar de sentirte incomodo. Da igual la buena comida, el sexo y un día de relax, q sea fiesta o se termine el año, estas jodido y lo sabes.

Te gustaría muchísimo de echarle la culpa a la borrachera, y q los síntomas no sean mas q una mala resaca. No señores, ayer tuve un momento a cámara lenta q fue el principio del fin de la noche, lo sigo arrastrando y no se como librarme de el.

Estábamos todos, viejos y nuevos, incluso los olvidados q tiempo atrás dejaron estas tierras para aventurarse en la vida, (al final, es cierto q todo el mundo vuelve a casa por navidad.) el alcohol corría a raudales, todo eran risas y juerga, estábamos en ese periodo de exaltación de la amistad q muchas veces nos trae el alcohol, pero mas en navidad, con estos viejos conocidos q hacia tanto q no veías. Allí estaban ellos, en circulo, combatiendo por nuestro territorio, por nuestra porción del bar, “bailando”. Fue entonces cuando lo sentí, como una mala película de argumento repetido. La música y las risas se atenuaron, te quedas inmóvil intentando discernir lo ocurrido, entonces la imagen parece algo mas alejada q el momento anterior, y entonces allí estaba, surgiendo de mi, intentando deslizarse fuera, no tenia motivo ni invitación alguna, nadie lo había provocado, pero eso no lo hacia menos real, demasiado tarde para pensar, para organizar una defensa, demasiado tarde para la lógica, me gustaría decir q no era tarde para mi, pero al final, tb lo fue.

Os dije, q tenia un plan, pero muchas veces es el plan el q te tiene a ti.

Conseguí mover mi paralizado cuerpo, arrastrarme fuera de allí, deslizarme hasta un callejón. A mi espalda la maldita y puta incertidumbre, miedo y pesar de no saber q coño esta pasando, pero saber perfectamente q cojones va a pasar. Me rompí, llegue, vi mi reflejo en una maltrecha puerta, y me rompí. Hecho pedazos, parodia de mi mismo, menos q nada, así me encontraron.

No lo puedo explicar, no había motivo, solo yo y el mundo, una patada del destino. Bien es cierto q soy un pequeño saco de mierda, toda dentro, lógico q de vez en cuando tenga q reventar por algún lado como el hijo de puta q soy. No soy a darme otra explicación, y eso me persigue y me tortura de un modo especial. Bueno, q me martirice todo lo q pueda, mas leña para aprender a q me la sude todo, incluso yo mismo.

Después de recoger los pedazos y olvidarme alguno en aquel callejón, me vestí con mentiras y me fui buscando un poco de autodestrucción, soy de los q piensan q el dolor adecuado te centra y te amarra a la vida, te recuerda q todavía no estas muerto. Llegue a casa (gracias a las subrutinas mentales por estos pequeños favores q me hace) lugar donde una señorita no se dejo meter demasiado en el trapo y me recordó, q no soy mi fondo de escritorio.

Estaréis todos por allí abajo, os mentí, dije q bajaría, nada mas lejos de mi intención, estoy destrozado, roto incluso para abusar de la botella de Johnny Walker, voy a darme un día mas para juntar los pedazos q me queden, y seguir la espiral descendente.

Necesito saber por q estoy vivo… sino, seria como estar muerto