El Rock no es la musica, es la ropa.
La frase de hoy, aparecio en labios de un colega el dia menos pensado, vino sin venir a cuento, pero era cierta como la vida misma, y es en dias como hoy, en los q te piras con un par de colegas a un concierto, q te das cuenta de lo cruel a la par q real es.
Alguien me dijo una vez, q matrix tenia 52 formas de leerse, obviamente yo me descojone de el. Esa chorrada me recordaba a esas salidas de clase q hacias cuando ibas al colegio y te llevaban de “excursión” a ver cuadros, los “profesores” de arte te deleitaban con las interpretaciones de los grandes expertos sobre la interpretación del cuadro y la verdadera intencion del artista.
Podria decir q todo esto me parece una puta mierda. Y es cierto, todo esto es basura. Para empezar no creo q los jodidos hermanos “inventores” de matrix pensaran en esas 52 formas de lectura q los putos freaks se han inventado, ellos solo tuvieron un idea q afortunadamente para ellos se vendio bien y fue comercial. Y el hecho de q supuestos expertos en arte me vengan con las premisas y pensamientos de un artista q murio hace 400 años, me parece, como poco surrealista. ¿Cómo cojones quieren hacerme creer q ellos y solo ellos son capaces de ver lo q el artista tenia en su mente a la hora de pintar, por q quieren hacerme creer q alguien, cuando pinta, quiere hacer MAS q simplemente eso, pintar.
Yo fui largos años de mi infancia a clases pintura, enviado por mi madre, pase horas y hora,s tardes y tardes, delante de diferentes linezos y formas de “expresión artistica”, y aunq cierto es q empujado, incitado por la maestra, en ninguno de los casos quise hacer nada mas q pintar, y lo hice muchas veces, repetidas veces, y me gustaba, nunca fui obligado ni empujado, ni lo hice por salir de alli, lo hacia y me gustaba, y no tenia mas sentido q eso. Pero no, estos maravillosos artistas de antaño tenian un motivo oculto.
Todo el mundo tiene un motivo oculto para todo, aunq no se de cuenta.
Lo q me parece triste, es q alguien, un mero ser humano q nunca ha llegado a conocerse a si mismo sea capaz de decir con total impunidad q puede discernir lo q otro pensaba, el cual, todo sea dicho lleva siglos muerto. Algo falla.
EL concierto, bien, gracias.
Como siempre me molesto la cantidad de gilipollas q se reúnen, pero bueno, ya sabemos q soy un tanto intolerante. Es en eso momento cuando recuerdo la frase q da titulo a este post, un amigo la dijo una noche, apoderado por el ciego, a mi me gusta pensar q era ese tipo de sabudira q muchas veces le es revelado a uno y q pugna por salir, y el alli, en mitad del ciego la escupio, lo recuerdo como is fuera ayer.
De un tiempo a esta parte me veo arrastrado a conciertos, y siempre q voy tu frase me viene a la cabeza, veo los grupos, veo la gente, les veo, y tu recuerdo me inunda, y si, tenias razon, son la ropa, en us momento solo tuve el saber necesario como apreciar el tesoro y apuntarlo, bendita sea mi adiccion, pues ahora soy capaz de comprenderte, ahora se de lo q hablabas. Y no sabes cuanta razon tienes.
Quiza mi intolerancia, y el odio q se me mantuvo a flor de piel, no me dejaron disfrutar del concierto en toda su magnificencia, pero me gusto. Lo disfrute, y recuerdo ahora tres detalles, q me llaman, sobretodo lo demas, la atención.
El primero es una mujer, y no me confundais, habia mujeres atractivas, pero no por esto la recuerdo, si tuviera q quedarme con una quiza con la bajita de tatuajes y novio. Me gusta q tengan novio. Pero no, el revival, no va de ese palo. Era la mujer extraña y fuera de lugar del final de la barra. Os describo.
Era un bar pequeño y cerrado, oscuro y atestado, la gente atestaba el lugar, e invadia la barra. Unos pocos freaks sin lugar, se acercaban al altar y bailan sin parar, hasta q sus cuerpos extasiados no podian nada mas q suplicar por el acohol o la coca q se rapartida en el baño sin cuartel. Asi pues cuando volvian en si, unas infinitas colas de peregrinaje se veian circular hasta el espejo. Habia porros y humo, y macarras por doquier. Pero ahí estaba ella, entra los tatuajes, los pierncin, las drogas y el aochol, al final de la barra, con sus pendientes de perlas, su camisa extanpada resonando contra el color negro q vestia no solo al lugar si no a los lugareños, ese rosa singular, esa disticion al preguntar al drogata del camarero si podia dejar su chaqueta en la barra cuando la barra estaba rellena de chupas de indigentes. Y yo me preguntaba. ¿q cojones haces tu aquí?.
Grandes misterios de ayer y hoy, la pregunta me perseguirá siempre… o quizás solo hasta q me acueste, pero algo es algo.
De hoy, dado lo q ya he com,entado, solo me queda por mecionar las dos frases, q me escupieron. “Eres demasiado radical”. Dicha por alguien q si bien no es mi colega, si le conozco como para tenr esa confianza, pero como no me conoce demasiado, no voy a decir q menuda gilipollez, aunq lo piense. No soy en absoluto radical, simplemente , como al resto, no me gusta comer mierda, si a ti, te ha terminado por gustar el sabor, no creas q el resto tenemos el cerebro reblandecido.
“Tienes demasiada facilidad para el odio”. Una persona diferente, q muy a su pesar puede decir q me conoce mas. Y q coño quiza tenga razon, pero creo q es una de mis grandes virtudes. Aunq si recordais, ya he dicho q el odio es algo muy especial, y muy concreto, mi odio, tal y como yo lo interpreto es para unos pocos, unos aventajados, odiar es muy cansado y no pienso hacerlo gratuitamente. Poca gente se lo merece.
[…]
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